17 de mayo de 2016
Tercer concurso de cuentos temáticas sobre residuos y reciclajes
El martes, 17 de mayo de 2016, se inaguró en el centro cultural LECRAC la exposición de los trabajos presentados por los alumnos de diferentes colegios de nuestra provincia que han participado en este Tercer Concurso sobre residuos y reciclajes: RELATA RECICLA.
Nuestro centro participó con numeros trabajos, donde nuestros alumnos demostraron sus dotes de artistas y excelentes escritores.
Nuestra alumna de 6º, Paula Atienza Ramos, ha sido la ganadora en la modalidad de alumnos de 5º y 6º. Su precioso cuento ha sido valorado por el jurado como el de más calidad artística entre todos los presentados cuyo nivel era muy elevado.
Felicitamos a todos los participantes y muy especialmente a los finalistas que también han sido de nuestro cole: Sara, Alfonso, Adrián, Mario y de nuevo Paula con su segundo cuento.
Por la alta participación y la calidad presentada por nuestros alumnos, nuestro cole otuvo un DIPLOMA DE HONOR.
En el blog de Sexto, podéis seguir con más detalle este evento.
Nuestra felicitación a los alumnos y sus maestros
Sistema de extinción de incendios en campanas extractoras
Extintores co2 2 kg
Extintor 6 kg abc
Cuando hablamos de seguridad contra incendios, la elección del extintor adecuado puede marcar la diferencia entre un incidente controlado y una catástrofe. Los incendios se originan por causas muy distintas y cada uno exige un agente extintor específico para ser neutralizado de manera eficaz. Por ello, conocer los tipos de fuego y extintores disponibles es esencial para actuar de forma rápida y segura en cualquier entorno.
Uno de los modelos más prácticos y recomendados para viviendas, oficinas pequeñas o vehículos es el extintor 3 kg. Este tamaño ofrece un equilibrio perfecto entre portabilidad y eficacia, siendo suficientemente ligero para que cualquier persona pueda manipularlo y, al mismo tiempo, potente para sofocar incendios de tamaño reducido o iniciales. Su uso resulta ideal en espacios donde no se justifica un extintor de gran capacidad, pero donde la seguridad no puede quedar en segundo plano. Además, al ser compacto, puede instalarse en lugares estratégicos sin ocupar demasiado espacio.
Entre todos los modelos, los extintores abc destacan por su polivalencia. Su polvo químico seco permite actuar sobre incendios de clase A (materiales sólidos), B (líquidos inflamables) y C (gases combustibles). Esto significa que un solo dispositivo puede cubrir un amplio rango de posibles emergencias, desde un fuego en la cocina hasta un incendio en un garaje o almacén. Otra de sus ventajas es que no son conductores de electricidad, lo que permite utilizarlos con seguridad en entornos con instalaciones eléctricas activas. Por esta razón, son uno de los más recomendados tanto en viviendas como en locales comerciales.
Para realizar una elección correcta, resulta fundamental entender cómo se clasifican los tipos de fuego y extintores. Cada tipo de fuego se origina a partir de un material combustible específico, y el éxito al apagarlo depende de utilizar el agente adecuado. La clasificación más extendida en Europa y España incluye:
Clase A: incendios de materiales sólidos como madera, cartón, textiles o plásticos.
Clase B: fuegos provocados por líquidos inflamables como gasolina, disolventes o aceites.
Clase C: incendios originados por gases combustibles como butano, propano o gas natural.
Clase D: fuegos poco comunes pero peligrosos que afectan a metales combustibles (magnesio, titanio, sodio).
Clase F: incendios en aceites y grasas de origen vegetal o animal, frecuentes en cocinas domésticas e industriales.
Cada una de estas categorías exige un extintor específico para garantizar eficacia y evitar riesgos adicionales. Por ejemplo, intentar apagar un fuego de líquidos inflamables con agua podría ser contraproducente y agravar la situación.
Los extintores de dióxido de carbono (CO2) son imprescindibles en lugares donde la protección de equipos sensibles es prioritaria. Laboratorios, salas de servidores, oficinas con gran cantidad de dispositivos electrónicos o centros de datos suelen contar con ellos. El gas desplaza el oxígeno y enfría la superficie, lo que detiene la combustión sin dejar restos ni dañar los equipos. Son especialmente recomendables para incendios de clase B y C, así como para instalaciones eléctricas.
En talleres, garajes o industrias donde se manipulan líquidos inflamables y materiales sólidos, los extintores de espuma se convierten en aliados esenciales. Su acción crea una capa que aísla el combustible y sofoca las llamas, reduciendo la evaporación de los líquidos inflamables. Funcionan perfectamente contra fuegos de clase A y B, aunque no deben usarse en entornos eléctricos ya que la espuma es conductora.
Los extintores de agua son altamente efectivos frente a incendios de clase A gracias a su gran capacidad de enfriamiento. Con la adición de agentes especiales, algunos modelos se adaptan para fuegos de clase F, muy comunes en cocinas. No obstante, están contraindicados en situaciones con presencia de electricidad o líquidos inflamables, por lo que su uso debe evaluarse con precaución. En jardines, exteriores o espacios con predominio de materiales sólidos son una excelente elección.
Cada vez más populares, los extintores en aerosol representan una alternativa innovadora para hogares y vehículos. Son ligeros, fáciles de usar y no requieren mantenimiento constante. Aunque su capacidad es limitada, pueden ser comparables a un extintor de polvo de 1 kg. Son eficaces contra incendios de clases A, B y C, y constituyen un complemento perfecto en espacios donde se requiere una herramienta rápida y accesible.
En el mercado encontramos desde pequeños modelos de 1 kg hasta equipos industriales de 50 kg montados en carros para un uso intensivo. Los más comunes en hogares y oficinas son:
Extintor de polvo ABC de 6 kg, ideal para espacios residenciales y comerciales.
Extintor CO2 de 2 kg, perfecto para oficinas y salas con equipos eléctricos.
Extintor 3 kg, equilibrado y funcional para lugares donde se busca portabilidad y eficacia.
La elección debe considerar no solo el tipo de fuego más probable en el entorno, sino también la facilidad de uso, el mantenimiento y las normativas locales en materia de prevención.
Evalúe los riesgos: identifique los materiales predominantes en su entorno.
Instale los extintores en lugares estratégicos: accesibles, visibles y señalizados.
Realice inspecciones periódicas: verifique el estado de la presión y caducidad.
Capacite a los usuarios: todos los ocupantes deben saber utilizar el extintor en caso de emergencia.
Cumpla con la normativa vigente: asegúrese de que los dispositivos estén homologados.
Disponer del extintor adecuado para cada tipo de fuego no es solo una medida de prevención, sino una inversión en seguridad y tranquilidad. La clave está en elegir el dispositivo correcto, ubicarlo en el lugar idóneo y garantizar su mantenimiento periódico. Actuar con rapidez y eficacia frente a un incendio puede salvar vidas y proteger bienes materiales de gran valor.
La preparación comienza con la información. Conocer la clasificación de incendios, los diferentes tipos de extintores y sus características nos permite tomar decisiones acertadas y estar listos para cualquier eventualidad.